El Sistema HARPC y la Norma ISO 22000 (Última parte)
“Donde hay Educación, no hay distinción de clases"
Platón
Norma ISO 22000:2005 (Última parte)
Gestión de Inocuidad en Alimentos
La inocuidad de los alimentos se refiere a la existencia de peligros
asociados a los alimentos en el momento de su consumo (ingestión por los consumidores).
Como la introducción de peligros para la inocuidad de los alimentos puede
ocurrir en cualquier punto de la cadena alimentaria, es esencial un control
adecuado a través de toda la cadena alimentaria. Así, la inocuidad de los
alimentos está asegurada a través de la combinación de esfuerzos de todas las
partes que participan en la cadena alimentaria. Las organizaciones dentro de la
cadena alimentaria varían desde productores de alimentos para animales y
productores primarios, hasta fabricantes de alimentos, operadores de transporte
y almacenaje y subcontratistas para la venta al por menor y centros de
servicios de alimentación (junto con organizaciones interrelacionadas tales
como productores de equipamiento, material de embalaje, agentes de limpieza,
aditivos e ingredientes). Los proveedores de servicios también están incluidos.
La Norma Internacional ISO 22000:2005, especifica los requisitos para un
sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos que combina los siguientes
elementos clave generalmente reconocidos, para asegurar la inocuidad de los
alimentos a lo largo de toda la cadena alimentaria, hasta el punto de consumo
final:
· Comunicación
interactiva
· Gestión del sistema
· Programas de
prerrequisitos
· Principios del HACCP
La comunicación a lo largo de toda la cadena alimentaria es esencial
para asegurar que todos los peligros pertinentes a la inocuidad de los
alimentos sean identificados y controlados adecuadamente en cada punto dentro
de la cadena alimentaria. Esto implica comunicación entre organizaciones, en
ambos sentidos de la cadena alimentaria. La comunicación con los clientes y
proveedores acerca de los peligros identificados y las medidas de control
ayudarán a clarificar los requisitos del cliente y del proveedor (por ejemplo
con relación a la viabilidad y necesidad de esos requisitos y su impacto sobre
el producto terminado). El reconocimiento de la función y la posición de la
organización dentro de la cadena alimentaria es esencial para asegurar una
comunicación interactiva eficaz a través de la cadena con el objeto de entregar
productos alimenticios inocuos al consumidor final. Los sistemas más eficaces
en materia de inocuidad de los alimentos están establecidos, ejecutados y
actualizados dentro del marco de trabajo de un sistema de gestión estructurado,
y están incorporados dentro de las actividades globales de gestión de la
organización.
Esto proporciona el máximo beneficio para la organización y las
partes interesadas. Esta Norma Internacional ha sido alineada con la Norma ISO
9001 con el objeto de aumentar la compatibilidad de las dos normas. Se puede
aplicar esta Norma Internacional independientemente de otras normas de sistemas
de gestión. Su implementación se puede alinear o integrar con los requisitos
existentes de sistemas de gestión relacionados, mientras que las organizaciones
pueden utilizar los sistemas de gestión existentes para establecer un sistema
de gestión de la inocuidad de los alimentos que cumpla los requisitos de esta
Norma Internacional, que integra los principios del sistema de Análisis de
Peligros y Puntos Críticos de Control (HACCP) y las etapas de aplicación
desarrollados por la Comisión del Codex Alimentarius. Por medio de requisitos
auditables, combina el plan HACCP con programas de prerrequisitos (PPR). El
análisis de peligros es la clave para un sistema de gestión de la inocuidad de
los alimentos eficaz, ya que llevarlo a cabo ayuda a organizar los conocimientos
requeridos para establecer una combinación eficaz de medidas de control.
Esta
Norma Internacional requiere que se identifiquen y evalúen todos los peligros
que razonablemente se puede esperar que ocurran en la cadena alimentaria,
incluyendo peligros que pueden estar asociados con el tipo de proceso e
instalaciones utilizadas. De este modo proporciona los medios para determinar y
documentar por qué ciertos peligros identificados necesitan ser controlados por
una organización en particular y por qué otros no lo necesitan. Durante el
análisis de peligros, la organización determina la estrategia a utilizar para
asegurar el control de peligros combinando los PPR, los PPR operativos y el plan
HACCP. Para facilitar la aplicación de esta Norma Internacional, la misma ha
sido desarrollada como una norma auditable. Sin embargo, las organizaciones
individuales son libres de elegir los métodos y enfoques necesarios para
cumplir los requisitos de esta Norma Internacional. Para ayudar a las
organizaciones individuales con la implementación de esta Norma Internacional,
se proporciona orientación sobre su uso en la Especificación Técnica ISO/TS
22004.
Esta Norma Internacional está prevista para tratar sólo los aspectos
concernientes a la inocuidad de los alimentos. El enfoque proporcionado por
esta Norma Internacional puede utilizarse también para organizar y responder a
otros aspectos específicos de los alimentos (por ejemplo temas éticos y de toma
de conciencia del consumidor). ISO 22000 permite a una organización (tal como
una organización pequeña y/o poco desarrollada) implementar una combinación de
medidas de control desarrollada externamente. El propósito de ella, es
armonizar a un nivel global los requisitos de la gestión de la inocuidad de los
alimentos para toda actividad dentro de la cadena alimentaria. Está
particularmente prevista para su aplicación por organizaciones que buscan un
sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos más enfocado, coherente e
integrado de lo requerido normalmente por la legislación. Requiere que una
organización cumpla todos los requisitos legales y reglamentarios que le sean
aplicables y estén relacionados con la inocuidad de los alimentos, a través de
su sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. Esta Norma
Internacional especifica requisitos para un sistema de gestión de la inocuidad
de los alimentos cuando una organización en la cadena alimentaria necesita
demostrar su capacidad para controlar los peligros relacionados con la
inocuidad de los alimentos, con el objeto de asegurarse de que el alimento es
inocuo en el momento del consumo humano.
Es aplicable a todas las
organizaciones, sin importar su tamaño, que estén involucradas en cualquier
aspecto de la cadena alimentaria y deseen implementar sistemas que proporcionen
de forma coherente productos inocuos. Los medios para alcanzar cualquier
requisito de esta Norma Internacional se pueden obtener a través del uso de
recursos internos y/o externos. Esta Norma Internacional especifica requisitos
que le permiten a una organización:
a) planificar, implementar, operar, mantener y actualizar un sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos destinado a proporcionar productos
que, de acuerdo a su uso previsto, sean inocuos para el consumidor,
b) demostrar conformidad con los requisitos legales y reglamentarios
aplicables en materia de inocuidad de los alimentos,
c) evaluar y valorar los requisitos del cliente y demostrar conformidad
con aquellos requisitos del cliente mutuamente acordados que se refieren a la
inocuidad de los alimentos, con el objetivo de aumentar la satisfacción del
cliente,
d) comunicar eficazmente los temas referidos a la inocuidad de los
alimentos a sus proveedores, clientes y partes interesadas pertinentes en la
cadena alimentaria,
e) asegurarse de su conformidad con la política de la inocuidad de los
alimentos declarada,
f) demostrar tal conformidad a las partes interesadas pertinentes, y
g) buscar la certificación o registro de su sistema de gestión de la
inocuidad de los alimentos por un organismo externo, o realizar una
autoevaluación o auto declaración de conformidad con esta Norma Internacional.
Todos los requisitos de esta Norma Internacional son genéricos y
pretenden ser aplicables a todas las organizaciones en la cadena alimentaria
sin importar su tamaño y complejidad. Esto incluye organizaciones directa o
indirectamente involucradas en una o más etapas de la cadena alimentaria. Las
organizaciones que están directamente vinculadas incluyen, entre otras,
productores de alimento para animales, cosechadores, agricultores, productores
de ingredientes, fabricantes de alimentos, minoristas, operadores de servicios
de comida y catering, organizaciones que proporcionan servicios de limpieza y
desinfección, transporte, almacenamiento y distribución. Otras organizaciones
que están indirectamente involucradas incluyen, entre otras, proveedores de
equipos, agentes de limpieza y desinfección, material de embalaje, y otros
materiales en contacto con los alimentos. Esta Norma Internacional permite a
una organización, tal como una organización pequeña y/o poco desarrollada (por
ejemplo una pequeña granja, un pequeño distribuidor de envases, un pequeño
vendedor minorista o de servicios de comida), implementar una combinación de
medidas de control desarrollada externamente. Para el propósito de este
documento, se aplican los términos y definiciones dados en la Norma ISO 9000 y
los siguientes.
CONCEPTOS GENERALES
Inocuidad de los alimentos: Concepto que implica que los alimentos no
causarán daño al consumidor cuando se preparan y/o consumen de acuerdo con el
uso previsto. La inocuidad de los alimentos es relativa a la ocurrencia de
peligros relacionados con la inocuidad de los alimentos y no incluye otros
aspectos relativos a la salud humana, por ejemplo, la desnutrición.
Cadena Alimentaria: Secuencia de las etapas y operaciones involucradas
en la producción, procesamiento, distribución, almacenamiento y manipulación de
un alimento y sus ingredientes, desde la producción primaria hasta el consumo.
Esto incluye la producción de alimentos para animales que a su vez producen
alimentos, y para animales destinados a la producción de alimentos. La cadena
alimentaria también incluye la producción de materiales destinados a estar en
contacto con los alimentos o con las materias primas.
Peligro relacionado con la inocuidad de los alimentos: Agente biológico,
químico o físico presente en un alimento, o la condición en que éste se halla,
que puede ocasionar un efecto adverso para la salud. El término “peligro” no se
debe confundir con el término “riesgo” el cual, en el contexto de la inocuidad
de los alimentos, significa una función de la probabilidad de que se produzca
un efecto adverso para la salud (por ejemplo enfermar) y la gravedad de ese
efecto (muerte, hospitalización, baja laboral, etc.) cuando estamos expuestos a
un peligro especificado. En la Guía ISO/IEC 51 “riesgo” está definido como la
combinación de la probabilidad de ocurrencia de un daño y de la severidad de
ese daño. Los alérgenos forman parte de los peligros relacionados con la
inocuidad de los alimentos. En lo que concierne a los alimentos para animales y
sus ingredientes, los peligros pertinentes relacionados con la inocuidad de los
alimentos son aquellos que pueden presentarse en estos, y que posteriormente
pueden ser transferidos a los alimentos a través de su consumo por los
animales, y por lo tanto pueden tener el potencial para causar un efecto
adverso para la salud humana. En lo que concierne a otras operaciones aparte de
las que implican una manipulación directa de los alimentos para animales y
alimentos para consumo humano (por ejemplo productores de materiales de
embalaje, agentes de limpieza, etc.), los peligros pertinentes relacionados con
la inocuidad de los alimentos son aquellos que pueden transferirse directa o
indirectamente a los alimentos debido al uso previsto de los productos y/o
servicios proporcionados, y por lo tanto pueden tener el potencial para causar
un efecto adverso para la salud humana.
Política de la inocuidad de los alimentos: Intenciones globales y
orientación de una organización relativas a la inocuidad de los alimentos tal
como se expresan formalmente por la alta dirección.
Producto terminado: Producto que no será objeto de ningún tratamiento o
transformación posterior por parte de la organización. Un producto que será
sometido a tratamiento o transformación posterior por otra organización es un
producto final en el contexto de la primera organización y una materia prima o
un ingrediente en el contexto de la segunda organización.
Diagrama de flujo: Presentación esquemática y sistemática de la
secuencia de etapas y de su interacción.
Medida de control: Acción o actividad que puede realizarse para prevenir
o eliminar un peligro relacionado con la inocuidad de los alimentos o para
reducirlo a un nivel aceptable.
PPR (Programa de prerrequisito): Condiciones y actividades básicas que
son necesarias para mantener a lo largo de toda la cadena alimentaria un
ambiente higiénico apropiado para la producción, manipulación y provisión de
productos finales inocuos y alimentos inocuos para el consumo humano. Los PPR
necesarios dependen del segmento de la cadena alimentaria en el que opera la
organización y del tipo de organización. Son ejemplos de términos equivalentes:
Buenas Prácticas Agrícolas (BPA), Buenas Prácticas Veterinarias (BPV), Buenas
Prácticas de Fabricación/Manufactura (BPF, BPM), Buenas Prácticas de Higiene
(BPH), Buenas Prácticas de Producción (BPP), Buenas Prácticas de Distribución
((BPD), y Buenas Prácticas de Comercialización (BPC).
PPR operativo: Programa de prerrequisitos de operación (PPR)
identificado por el análisis de peligros como esencial para controlar la
probabilidad de introducir peligros relacionados con la inocuidad de los
alimentos y/o la contaminación o proliferación de peligros relacionados con la
inocuidad de los alimentos en los productos o en el ambiente de producción.
PCC (Punto crítico de control): Etapa en la que puede aplicarse un
control y que es esencial para prevenir o eliminar un peligro relacionado con
la inocuidad de los alimentos o para reducirlo a un nivel aceptable.
Límite crítico: Criterio que diferencia la aceptabilidad de la
inaceptabilidad. Los límites críticos se establecen para determinar si un PCC
sigue bajo control. Si se excede o infringe un límite crítico, a los productos
afectados se los considera potencialmente no inocuos.
Seguimiento: Llevar a cabo una secuencia planificada de observaciones o
mediciones para evaluar si las medidas de control están funcionando según lo
previsto.
Corrección: Acción tomada para eliminar una no conformidad detectada.
Para el propósito de esta Norma Internacional, una corrección se refiere a la
manipulación de productos potencialmente no inocuos, y por lo tanto puede
efectuarse conjuntamente con una acción correctiva. Una corrección puede ser,
por ejemplo, reprocesado, procesado posterior, y/o eliminación de las
consecuencias adversas de la no conformidad (por ejemplo la disposición para
otro uso o un etiquetado específico).
Acción correctiva: Acción tomada para eliminar la causa de una no
conformidad detectada u otra situación indeseable. Puede haber más de una causa
para una no conformidad. La acción correctiva incluye el análisis de las causas
y se toma para prevenir que vuelva a ocurrir.
Validación: Obtención de evidencia de que las medidas de control
gestionadas por el plan HACCP y por los PPR operativos son capaces de ser
eficaces. Esta definición es más apropiada para el campo de la inocuidad de los
alimentos que la definición dada en la Norma ISO 9000.
Verificación: Confirmación, mediante la aportación de evidencia
objetiva, de que se han cumplido los requisitos especificados.
Actualización: Actividad inmediata y/o planificada para asegurar la
aplicación de la información más reciente.
Sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos
La organización debe establecer, documentar, implementar y mantener un
sistema eficaz de gestión de la inocuidad de los alimentos y actualizarlo
cuando sea necesario de acuerdo con los requisitos de esta Norma Internacional.
La organización debe definir el alcance del sistema de gestión de la inocuidad
de los alimentos. El alcance debe especificar los productos o categorías de
productos, los procesos y los lugares de producción cubiertos por el sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos. La organización debe:
a) asegurarse de que se identifican, evalúan y controlan los peligros
relacionados con la inocuidad de los alimentos razonablemente previsibles para
los productos dentro del alcance del sistema, de tal manera que los productos
de la organización no dañen al consumidor directa ni indirectamente,
b) comunicar la información apropiada, a través de toda la cadena
alimentaria, relativa a temas de inocuidad relacionados con sus productos,
c) comunicar la información concerniente al desarrollo, la
implementación y la actualización del sistema de gestión de la inocuidad de los
alimentos a través de la organización, hasta el grado que sea necesario para
asegurar la inocuidad de los alimentos requerida por esta Norma Internacional,
y
d) evaluar periódicamente, y actualizar cuando sea necesario, el sistema
de gestión de la inocuidad de los alimentos para asegurarse de que el sistema
refleja las actividades de la organización e incorpora la información más
reciente de los peligros sujetos a control relacionados con la inocuidad de los
alimentos.
Cuando una organización opta por contratar externamente algún proceso
que pueda afectar a la conformidad del producto final, la organización debe asegurarse
de controlar tales procesos. El control sobre tales procesos contratados
externamente debe estar identificado y documentado dentro del sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos. La documentación del sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos debe incluir:
a) declaraciones documentadas de una política de la inocuidad de los
alimentos y de objetivos relacionados
b) los procedimientos documentados y registros requeridos por esta Norma
Internacional,
c) documentos que la organización necesita para asegurarse del eficaz
desarrollo, implementación y actualización del sistema de gestión de la
inocuidad de los alimentos.
Los documentos requeridos por el sistema de gestión de la inocuidad de
los alimentos deben controlarse. Los registros son un tipo especial de
documento y deben controlarse de igual manera. Los controles deben asegurar que
todos los cambios propuestos se revisan antes de su implementación para
determinar sus efectos sobre la inocuidad de los alimentos y su impacto sobre el
sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. Se debe establecer un
procedimiento documentado que defina los controles necesarios para:
a) aprobar los documentos en cuanto a su adecuación antes de su emisión,
b) revisar y actualizar los documentos cuando sea necesario, y
aprobarlos nuevamente,
c) asegurarse de que se identifican los cambios y el estado de revisión
actual de los documentos,
d) asegurarse de que las versiones pertinentes de los documentos
aplicables se encuentran disponibles en los puntos de uso,
e) asegurarse de que los documentos permanecen legibles y fácilmente
identificables,
f) asegurarse de que se identifican los documentos pertinentes de origen
externo y se controla su distribución, y g) prevenir el uso no intencionado de
documentos obsoletos, y asegurarse de que están identificados apropiadamente
como tales en el caso de que se mantengan por cualquier razón.
Los registros deben establecerse y mantenerse para proporcionar
evidencia de la conformidad con los requisitos así como de la operación eficaz
del sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. Los registros deben
permanecer legibles, fácilmente identificables y recuperables. Debe
establecerse un procedimiento documentado para definir los controles necesarios
para la identificación, el almacenamiento, la protección, la recuperación, el
tiempo de retención y la disposición de los registros.
Responsabilidad de la dirección
La alta dirección debe proporcionar evidencia de su compromiso con el
desarrollo e implementación del sistema de gestión de la inocuidad de los
alimentos, así como con la mejora continua de su eficacia:
a) mostrando que los objetivos de negocio de la organización apoyan la
inocuidad de los alimentos,
b) comunicando a la organización la importancia de cumplir los
requisitos de esta Norma Internacional, todos los requisitos legales y
reglamentarios, así como los requisitos del cliente relacionados con la
inocuidad de los alimentos,
c) estableciendo la política de la inocuidad de los alimentos,
d) llevando a cabo las revisiones por la dirección, y
e) asegurando la disponibilidad de recursos.
La alta dirección debe definir, documentar y comunicar su política de la
inocuidad de los alimentos. La alta dirección debe asegurarse de que la política
de la inocuidad de los alimentos:
a) es apropiada para la función que cumple la organización dentro de la
cadena alimentaria,
b) es conforme con los requisitos legales y reglamentarios y con los
requisitos acordados mutuamente con los clientes sobre la inocuidad de los
alimentos,
c) se comunica, implementa y mantiene en todos los niveles de la
organización,
d) se revisa para su continua adecuación,
e) trata la comunicación de manera adecuada y
f) está respaldada por objetivos medibles.
La alta dirección debe asegurarse de que:
a) se lleva a cabo la planificación del sistema de gestión de la
inocuidad de los alimentos para cumplir los requisitos citados así como los
objetivos de la organización que apoyan la inocuidad de los alimentos, y
b) se mantiene la integridad del sistema de gestión de la inocuidad de
los alimentos cuando se planifican e implementan cambios en este.
La alta dirección debe asegurarse de que las responsabilidades y
autoridades están definidas y son comunicadas dentro de la organización, para
asegurarse de la operación y el mantenimiento eficaces del sistema de gestión
de la inocuidad de los alimentos. Todo el personal debe tener la
responsabilidad de informar a las personas identificadas sobre los problemas
con el sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. El personal
designado debe tener definidas la responsabilidad y autoridad para iniciar y
registrar acciones. La alta dirección debe designar un líder del equipo de la
inocuidad de los alimentos quien, con independencia de otras responsabilidades,
debe tener la responsabilidad y autoridad para:
a) dirigir el equipo de la inocuidad de los alimentos y organizar su
trabajo,
b) asegurar la formación y educación pertinente de los miembros del
equipo de la inocuidad de los alimentos,
c) asegurar que se establece, implementa, mantiene y actualiza el
sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos,
d) informar a la alta dirección de la organización sobre la eficacia y
adecuación del sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos.
La responsabilidad del líder del equipo de la inocuidad de los alimentos
puede incluir relaciones con partes externas sobre asuntos referentes al
sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. Para asegurarse de que a
través de la cadena alimentaria está disponible la suficiente información sobre
los temas que conciernen a la inocuidad de los alimentos, la organización debe
establecer, implementar y mantener disposiciones eficaces para comunicarse con:
a) proveedores y contratistas,
b) clientes o consumidores, en particular con relación a la información
sobre el producto (incluyendo las instrucciones relativas al uso previsto,
requisitos específicos de almacenamiento y, cuando sea apropiado, caducidad),
las consultas, los contratos o la atención de pedidos, incluyendo las
modificaciones, y la retroalimentación del cliente, incluyendo sus quejas,
c) autoridades legales y reglamentarias,
d) otras organizaciones que afectan a, o serán afectadas por, la
eficacia o la actualización del sistema de gestión de la inocuidad de los
alimentos.
Dicha comunicación debe proporcionar información sobre los aspectos relativos
a la inocuidad de los alimentos de los productos de la organización que puedan
ser pertinentes para otras organizaciones dentro de la cadena alimentaria. Esto
se aplica especialmente a los peligros conocidos para la inocuidad de los
alimentos que necesitan ser controlados por otras organizaciones de la cadena
alimentaria. Se deben mantener los registros de las comunicaciones. Los
requisitos de las autoridades legales y reglamentarias y de los clientes,
relativos a la inocuidad de los alimentos, deben estar disponibles.
El personal designado debe tener definida la responsabilidad y autoridad
para comunicar externamente cualquier información concerniente a la inocuidad
de los alimentos. La información obtenida a través de comunicación externa debe
ser incluida como elemento de entrada para la actualización del sistema y la
revisión. La organización debe establecer, implementar y mantener pautas
eficaces para la comunicación con el personal sobre las cuestiones que afectan
a la inocuidad de los alimentos. Con el fin de mantener la eficacia del sistema
de gestión de la inocuidad de los alimentos, la organización debe asegurarse de
que se informa oportunamente al equipo de la inocuidad de los alimentos de los
cambios realizados a, entre otros, lo siguiente:
a) productos o nuevos productos;
b) materias primas, ingredientes y servicios;
c) sistemas y equipos de producción;
d) locales de producción, ubicación de los equipos, entorno circundante;
e) programas de limpieza y desinfección;
f) sistemas de embalaje, almacenamiento y distribución;
g) niveles de calificación del personal y/o asignación de
responsabilidades y autorizaciones;
h) requisitos legales y reglamentarios;
i) conocimientos relativos a los peligros para la inocuidad de los
alimentos y las medidas de control;
j) requisitos del cliente, del sector y otros requisitos que la
organización tiene en cuenta;
k) consultas pertinentes de las partes interesadas externas;
l) quejas indicando peligros relacionados con la inocuidad de los
alimentos, asociados al producto;
m) otras condiciones que tengan un impacto en la inocuidad de los
alimentos.
El equipo de la inocuidad de los alimentos debe asegurarse de que esta
información sea incluida en la actualización del sistema de gestión de la
inocuidad de los alimentos. La alta dirección debe asegurarse de que la
información pertinente sea incluida como información de entrada para la
revisión por la dirección. La alta dirección debe establecer, implementar
y mantener procedimientos para gestionar potenciales situaciones de emergencia
y accidentes que pueden afectar a la inocuidad de los alimentos y que son
pertinentes a la función de la organización en la cadena alimentaria. La alta
dirección debe revisar a intervalos planificados el sistema de gestión de la
inocuidad de los alimentos para asegurarse de su conveniencia, adecuación y
eficacia continuas. Esta revisión debe incluir la evaluación de las
oportunidades de mejora y la necesidad de efectuar cambios en el sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos, incluyendo la política de la
inocuidad de los alimentos. Se deben mantener registros de las revisiones por
la dirección. La información de entrada para la revisión por la dirección debe
incluir entre otras, información sobre:
a) las acciones de seguimiento de revisiones por la dirección previas,
b) el análisis de los resultados de las actividades de verificación,
c) circunstancias cambiantes que puedan afectar a la inocuidad de los
alimentos,
d) situaciones de emergencia, accidentes y retirada del producto,
e) la revisión de los resultados de las actividades de actualización del
sistema,
f) la revisión de las actividades de comunicación, incluyendo la
retroalimentación del cliente,
g) auditorías externas o inspecciones.
El término “retirada del producto” incluye la recuperación del producto
del mercado. Los datos deben presentarse de manera que permita a la alta
dirección relacionar la información con los objetivos establecidos del sistema
de gestión de la inocuidad de los alimentos. Los resultados de la revisión por
la dirección deben incluir las decisiones y acciones relacionadas con:
a) el aseguramiento de la inocuidad de los alimentos,
b) la mejora de la eficacia del sistema de gestión de la inocuidad de
los alimentos,
c) las necesidades de recursos,
d) las revisiones de la política de la inocuidad de los alimentos de la
organización y los objetivos relacionados.
Gestión de los recursos
La organización debe proporcionar los recursos adecuados para
establecer, implementar, mantener y actualizar el sistema de gestión de la
inocuidad de los alimentos. El equipo de la inocuidad de los alimentos y demás
personal que realice actividades que afecten a la inocuidad de los alimentos
debe ser competente y debe tener la educación, formación, habilidades y
experiencia apropiadas. Cuando se requiere la asistencia de expertos externos
para el desarrollo, implementación, operación o evaluación del sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos, deben estar disponibles los registros
de los acuerdos o contratos definiendo la responsabilidad y autoridad de dichos
expertos. La organización debe:
a) identificar la competencia necesaria para el personal cuyas
actividades afectan a la inocuidad de los alimentos,
b) proporcionar formación o tomar otras acciones para asegurarse de que
el personal tiene la competencia necesaria,
c) asegurarse de que el personal responsable de realizar el seguimiento,
las correcciones y las acciones correctivas del sistema de gestión de la
inocuidad de los alimentos está formado,
d) evaluar la implementación y la eficacia de los puntos a), b) y c),
e) asegurarse de que el personal es consciente de la pertinencia e
importancia de sus actividades individuales para contribuir a la inocuidad de
los alimentos,
f) asegurarse de que el requisito de una comunicación eficaz sea
entendido por todo el personal cuyas actividades afectan a la inocuidad de los
alimentos, y
g) mantener los registros apropiados sobre la formación y las acciones
descritas en los puntos b) y c).
La organización debe proporcionar los recursos para establecer y
mantener la infraestructura necesaria para implementar los requisitos de esta
Norma Internacional y debe proporcionar los recursos para establecer, gestionar
y mantener el ambiente de trabajo necesario para implementar los requisitos de
esta Norma Internacional.
Planificación y realización de productos inocuos
La organización debe planificar y desarrollar los procesos necesarios
para la realización de productos inocuos. La organización debe implementar,
operar y asegurar la eficacia de las actividades planificadas y de cualquier
cambio en las mismas. Esto incluye los PPR así como también los PPR operativos
y/o el plan HACCP. La organización debe establecer, implementar y mantener uno
o más PPR para ayudar a controlar:
a) la probabilidad de introducir peligros para la inocuidad de los
alimentos en el producto a través del ambiente de trabajo,
b) la contaminación biológica, química y física del producto o los
productos, incluyendo la contaminación cruzada entre productos, y
c) los niveles de peligro relacionado con la inocuidad de los alimentos
en el producto y en el ambiente en donde se elabora.
A su vez, los PPR deben:
a) ser apropiados a las necesidades de la organización en relación a la
inocuidad de los alimentos,
b) ser apropiados al tamaño y al tipo de operación, y a la naturaleza de
los productos que se elaboran y/o manipulan,
c) implementarse a través del sistema de producción en su totalidad,
tanto como programas de aplicación en general o como programas aplicables a un
producto o línea de producción en particular, y
d) ser aprobados por el equipo de la inocuidad de los alimentos.
La organización debe identificar los requisitos legales y reglamentarios
relacionados con lo dicho anteriormente. Cuando se seleccionan y/o establecen
los PPR, la organización debe considerar y utilizar la información apropiada
(por ejemplo los requisitos legales y reglamentarios, los requisitos del
cliente, las directrices reconocidas, los principios y los códigos de práctica
de la Comisión del Codex Alimentarius, las normas nacionales, internacionales o
del sector). La organización debe considerar lo siguiente al establecer estos
programas:
a) la construcción y la distribución de los edificios y las
instalaciones relacionadas;
b) la distribución de los locales, incluyendo el espacio de trabajo y
las instalaciones para los empleados;
c) los suministros de aire, agua, energía y otros servicios;
d) los servicios de apoyo, incluyendo la eliminación de los desechos y
de las aguas residuales;
e) la idoneidad de los equipos y su accesibilidad para la limpieza, el
mantenimiento y el mantenimiento preventivo;
f) la gestión de los materiales comprados (por ejemplo las materias
primas, los ingredientes, los productos químicos y el embalaje), los
suministros (por ejemplo agua, aire, vapor y hielo), la disposición (de basura
y aguas residuales) y la manipulación de los productos (por ejemplo el
almacenamiento y el transporte);
g) las medidas para prevenir la contaminación cruzada;
h) la limpieza y desinfección;
i) el control de plagas;
j) la higiene del personal;
k) otros aspectos según sea apropiado.
La verificación de los PPR debe planificarse y los PPR deben ser
modificados según sea necesario. Se deben mantener los registros de las
verificaciones y las modificaciones. Los documentos deberían especificar de qué
manera se gestionan las actividades incluidas en los PPR. Toda información
pertinente necesaria para llevar a cabo el análisis de peligros debe ser
recopilada, mantenida, actualizada y documentada. Se deben mantener los
registros. Se debe designar un equipo de la inocuidad de los alimentos. El equipo
de la inocuidad de los alimentos debe tener una combinación de conocimientos de
varias disciplinas y experiencia en el desarrollo y la implementación del
sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. Esto incluye, entre otros,
los productos de la organización, los procesos, los equipos y los peligros
relacionados con la inocuidad de los alimentos dentro del ámbito del sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos. Se deben mantener registros que
demuestren que el equipo de la inocuidad de los alimentos tiene los
conocimientos y la experiencia requeridos. Todas las materias primas, los
ingredientes y los materiales en contacto con el producto deben ser descritos
en documentos con el detalle que sea necesario para llevar a cabo el análisis de
peligros, incluyendo lo siguiente según sea apropiado:
a) las características biológicas, químicas y físicas;
b) la composición de los ingredientes formulados, incluyendo los
aditivos y coadyuvantes del proceso;
c) el origen;
d) el método de producción;
e) los métodos de embalaje y distribución;
f) las condiciones de almacenamiento y la caducidad;
g) la preparación y/o el tratamiento previo a su uso o procesamiento;
h) los criterios de aceptación relacionados con la inocuidad de los
alimentos o las especificaciones de los materiales comprados y de los
ingredientes apropiados para sus usos previstos.
La organización debe identificar los requisitos legales y reglamentarios
de inocuidad de los alimentos relacionados con lo anterior. Las descripciones
deben mantenerse actualizadas. Las características de los productos finales
deben describirse en documentos hasta el grado que sea necesario para llevar a
cabo el análisis de peligros, incluyendo información sobre los siguientes
aspectos, según sea apropiado:
a) el nombre del producto o identificación similar;
b) la composición;
c) las características biológicas, químicas y físicas pertinentes para
la inocuidad de los alimentos;
d) la vida útil prevista y las condiciones de almacenamiento;
e) el embalaje;
f) el etiquetado en relación con la inocuidad de los alimentos y/o
instrucciones para su manipulación, preparación y uso;
g) los métodos de distribución.
La organización debe identificar los requisitos legales y reglamentarios
de inocuidad de los alimentos relacionados con lo anterior. El uso previsto, la
manipulación razonablemente esperada del producto final, y cualquier
manipulación inapropiada no intencionada, pero razonablemente esperada, del
producto final deben ser considerados y descritos en documentos en la medida
que sea necesaria para llevar a cabo el análisis de peligros. Para cada
producto se deben identificar los grupos de usuarios y, cuando sea apropiado,
los grupos de consumidores, y también se deben considerar aquellos grupos de
consumidores conocidos por ser especialmente vulnerables a peligros específicos
relacionados con la inocuidad de los alimentos. Se deben preparar los diagramas
de flujo para los productos o las categorías de proceso abarcados por el
sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. Los diagramas de flujo
deben proporcionar la base para evaluar la posible presencia, incremento o
introducción de peligros relacionados con la inocuidad de los alimentos.
Los diagramas de flujo deben ser claros, precisos y suficientemente
detallados. Los diagramas de flujo deben incluir, según sea apropiado, lo
siguiente:
a) la secuencia e interacción de todas las etapas de la operación;
b) los procesos contratados externamente y el trabajo subcontratado;
c) dónde se incorporan al flujo las materias primas, los ingredientes y
los productos intermedios;
d) dónde se reprocesa y se hace el reciclado;
e) dónde salen o se eliminan los productos finales, los productos
intermedios, los subproductos y los desechos.
El equipo de la inocuidad de los alimentos debe verificar la precisión
de los diagramas de flujo a través de una comprobación in situ.
Los diagramas
de flujo verificados se deben mantener como registros. Las medidas de control
existentes, los parámetros del proceso y/o la rigurosidad con que se aplican, o
los procedimientos que puedan influir en la inocuidad de los alimentos deben
ser descritos en la medida que sea necesaria para llevar a cabo el análisis de
peligros. También se deben describir los requisitos externos (por ejemplo de
las autoridades reglamentarias o de los clientes) que pueden afectar a la
elección y la rigurosidad de las medidas de control. El equipo de la inocuidad
de los alimentos debe llevar a cabo un análisis de peligros para determinar
cuáles son los peligros que necesitan ser controlados, el nivel de control
requerido para asegurar la inocuidad de los alimentos y qué combinación de
medidas de control se requiere.
Todos los peligros relacionados con la inocuidad de los alimentos
razonablemente previsibles en relación con el tipo de producto, el tipo de
proceso y las instalaciones de elaboración utilizadas deben ser identificados y
registrados. La identificación debe realizarse en base a:
a) la información preliminar y los datos recopilados,
b) la experiencia,
c) la información externa que incluya, en la medida de lo posible, los
datos epidemiológicos y otros antecedentes históricos, y
d) la información de la cadena alimentaria sobre los peligros
relacionados con la inocuidad de los alimentos que puede ser importante para la
inocuidad de los productos finales, los productos intermedios y los alimentos
para consumo.
Debe indicarse la etapa o las etapas (desde las materias primas,
procesamiento y distribución) en las cuales se puede introducir cada peligro
relacionado con la inocuidad de los alimentos. Cuando se identifican los
peligros se deben considerar:
a) las etapas precedentes y siguientes a la operación especificada,
b) los equipos del proceso, servicios asociados y el entorno, y
c) los eslabones precedentes y siguientes en la cadena alimentaria.
Para cada peligro relacionado con la inocuidad de los alimentos
identificado, se debe determinar, cuando sea posible, el nivel aceptable del
peligro para la inocuidad de los alimentos en el producto final. El nivel
determinado debe tener en cuenta los requisitos legales y reglamentarios
establecidos, los requisitos del cliente en materia de inocuidad de los
alimentos, el uso previsto por el cliente y otros datos pertinentes. Se debe
registrar la justificación y el resultado de la determinación. Para cada
peligro relacionado con la inocuidad de los alimentos identificado se debe
llevar a cabo una evaluación de los peligros, para determinar si su eliminación
o reducción a niveles aceptables es esencial para la producción de un alimento
inocuo, si es necesario su control para permitir que se cumplan los niveles
aceptables definidos. Cada peligro relacionado con la inocuidad de los
alimentos debe evaluarse de acuerdo con la posible severidad de los efectos
adversos para la salud y la probabilidad de su ocurrencia. Se debe describir la
metodología utilizada, y se deben registrar los resultados de la evaluación de
los peligros relacionados con la inocuidad de los alimentos.
Con base en la
evaluación de peligros, se debe seleccionar una apropiada combinación de
medidas de control, que sea capaz de prevenir, eliminar o reducir estos
peligros relacionados con la inocuidad de los alimentos a los niveles
aceptables definidos. En esta selección, cada una de las medidas de control
debe revisarse con respecto a su eficacia frente a los peligros relacionados
con la inocuidad de los alimentos identificados. Las medidas de control
seleccionadas deben clasificarse según necesiten ser gestionadas a través de
PPR operativo o mediante el plan HACCP. La selección y clasificación debe
llevarse a cabo utilizando un enfoque lógico que incluya la evaluación con
respecto a lo siguiente:
a) su efecto sobre los peligros relacionados con la inocuidad de los
alimentos identificados según el rigor aplicado;
b) su viabilidad para el seguimiento (por ejemplo, la capacidad para
realizar su seguimiento en el momento oportuno para permitir correcciones
inmediatamente);
c) su lugar dentro del sistema con respecto a otras medidas de control;
d) la probabilidad de que falle el funcionamiento de una medida de
control o la variabilidad significativa del procesamiento;
e) la gravedad de la/s consecuencia/s en el caso de que falle su
funcionamiento;
f) si la medida de control se establece y aplica específicamente para
eliminar o reducir significativamente el nivel de peligros;
g) los efectos sinérgicos (es decir, la interacción que ocurre entre dos
o más medidas da como resultado un efecto combinado que es mayor que la suma de
sus efectos individuales).
Las medidas de control clasificadas como pertenecientes al plan HACCP
deben implementarse según está reglamentadas. Otras medidas de control deben
implementarse como PPR operativos. La metodología y los parámetros utilizados
para esta clasificación deben describirse en documentos y se deben registrar
los resultados de la evaluación. Los PPR operativos deben documentarse y deben
incluir la siguiente información para cada programa:
a) peligro(s) de inocuidad de los alimentos a controlar mediante el
programa;
b) medida(s) de control;
c) procedimientos de seguimiento que demuestren que los PPR operativos
están implementados;
d) correcciones y acciones correctivas a tomar si el seguimiento muestra
que los PPR operativos no están bajo control;
e) responsabilidades y autoridades;
f) registro(s) del seguimiento.
Para establecer un plan HACCP, primero debe estar documentado y debe incluir
la siguiente información para cada punto crítico de control (PCC):
a) peligro(s) relacionado(s) con la inocuidad de los alimentos a
controlar en los PCC;
b) medida(s) de control;
c) límite(s) crítico(s);
d) procedimiento(s) de seguimiento;
e) correcciones y acción(es) correctiva(s) a tomar si se superan los
límites críticos;
f) responsabilidades y autoridades;
g) registro(s) del seguimiento.
Para cada peligro que tiene que ser controlado mediante el plan HACCP,
se deben identificar los PCC para las medidas de control identificadas. Deben
determinarse los límites críticos para el seguimiento establecido para cada
PCC. Deben establecerse los límites críticos para asegurarse de que en el
producto final no se supera el nivel aceptable de los peligros relacionados con
la inocuidad de los alimentos identificados. Los límites críticos deben ser
medibles. Deben documentarse los motivos para la elección de los límites
críticos. Los límites críticos basados en datos subjetivos (tales como la
inspección visual del producto, procesos, manipulación, etc.) deben apoyarse
mediante instrucciones o especificaciones y/o educación y formación. Un sistema
de seguimiento debe establecerse para cada PCC, para demostrar que el PCC está
bajo control. El sistema debe incluir todas las mediciones u observaciones programadas
relativas al límite o los límites críticos. El sistema de seguimiento debe
constar de los procedimientos, instrucciones y registros pertinentes que
incluyan lo siguiente:
a) mediciones u observaciones que proporcionan resultados dentro de un
plazo adecuado;
b) equipos de seguimiento utilizados;
c) métodos de calibración aplicables;
d) frecuencia del seguimiento;
e) responsabilidad y autoridad relativa al seguimiento y evaluación de
los resultados del seguimiento;
f) los requisitos y métodos en materia de registro.
Los métodos y la frecuencia del seguimiento deben permitir determinar
cuándo se han superado los límites críticos, a tiempo para que el producto sea
aislado antes de que se utilice o consuma. Las correcciones planificadas y las
acciones correctivas a tomar cuando se superan los límites críticos se deben
especificar en el plan HACCP. Las acciones deben asegurar que se identifica la
causa de la no conformidad, que el parámetro o los parámetros controlados en el
PCC se ponen de nuevo bajo control y que se previene que vuelva a ocurrir.
Deben establecerse y mantenerse procedimientos documentados para la correcta
manipulación de los productos potencialmente no inocuos para asegurarse de que
estos no sean liberados hasta que hayan sido evaluados.
Después de haber establecido los PPR operativos y/o el plan HACCP, la
organización debe actualizar, si es necesario, la siguiente información:
a) características del producto;
b) uso previsto;
c) diagramas de flujo;
d) etapas del proceso;
e) medidas de control.
Si es necesario, el plan HACCP y los procedimientos e instrucciones que
especifican los PPR deben modificarse. La planificación de la verificación debe
definir el propósito, método, frecuencia y responsabilidades para las
actividades de verificación. Las actividades de verificación deben confirmar
que:
a) los PPR se han implementado,
b) se actualiza continuamente la información de entrada al análisis de
peligros,
c) los PPR operativos (véase 7.5) y los elementos dentro del plan HACCP
están implementados y son eficaces,
d) los niveles de peligro están dentro de los niveles aceptables
identificados, y
e) los otros procedimientos requeridos por la organización están
implementados y son eficaces.
El resultado de esta planificación debe estar en un formato adecuado
para los métodos de operación de la organización. Los resultados de la
verificación deben registrarse y deben comunicarse al equipo de la inocuidad de
los alimentos. Deben proporcionarse los resultados de la verificación para
permitir el análisis de los resultados de las actividades de verificación. Si
el sistema de verificación está basado en el ensayo de muestras del producto
final, y cuando tales muestras de ensayo presentan no conformidad con el nivel
aceptable de peligros para la inocuidad de los alimentos, los lotes de
productos afectados deben manipularse como potencialmente no inocuos de acuerdo
con el apartado. La organización debe establecer y aplicar un sistema de
trazabilidad que permita la identificación de los lotes de productos y su
relación con los lotes de materias primas, registros de procesamiento y
entrega. El sistema de trazabilidad debe permitir identificar el material que
llega de los proveedores inmediatos y la ruta inicial de distribución del
producto final.
Se deben mantener registros de trazabilidad durante un período definido
para la evaluación del sistema, para permitir la manipulación de los productos
potencialmente no inocuos y en el caso de retirada de productos. Los registros
deben estar de acuerdo con los requisitos legales y reglamentarios y los del
cliente y pueden, por ejemplo, basarse en la identificación del lote del
producto final. La organización debe asegurarse de que cuando se superan los
límites críticos para los PCC), o hay una pérdida en el control de los PPR
operativos, los productos afectados se identifican y controlan en lo que
concierne a su uso y liberación. Debe establecerse y mantenerse un
procedimiento documentado que defina:
a) la identificación y la evaluación de los productos finales afectados
para determinar su apropiada manipulación, y
b) una revisión de las correcciones que se han llevado a cabo.
Los productos fabricados bajo condiciones donde han sido superados los
límites críticos son productos potencialmente no inocuos y deben ser
manipulados de acuerdo con ello. Los productos fabricados bajo condiciones
donde no se han cumplido los PPR operativos se deben evaluar con respecto a la
causa o causas de la no conformidad y a las consecuencias derivadas en términos
de inocuidad de los alimentos y deben, cuando sea necesario, manipularse de
acuerdo a lo reglamentado. La evaluación debe registrarse. Todas las
correcciones deben ser aprobadas por las personas responsables, y deben
registrarse junto con la información sobre la naturaleza de la no conformidad,
sus causas y consecuencias, incluyendo la información necesaria para propósitos
de trazabilidad relacionados con los lotes no conformes. Los datos derivados
del seguimiento de los PPR operativos y los PCC deben evaluarse por personas
designadas con los conocimientos suficientes y la autoridad para iniciar
acciones correctivas. Las acciones correctivas deben iniciarse cuando se
superan los límites críticos o cuando hay una pérdida de conformidad con
los PPR operativos.
La organización debe establecer y mantener procedimientos
documentados que especifiquen las acciones apropiadas para identificar y
eliminar la causa de las no conformidades detectadas, para prevenir que vuelvan
a ocurrir, y para tener nuevamente bajo control al proceso o al sistema
después de encontrar la no conformidad. Estas acciones incluyen:
a) revisar las no conformidades (incluyendo las quejas de los clientes),
b) revisar las tendencias en los resultados del seguimiento que pueden
indicar una evolución hacia la pérdida de control,
c) determinar las causas de las no conformidades,
d) evaluar la necesidad de adoptar acciones para asegurarse de que la no
conformidad no vuelve a ocurrir,
e) determinar e implementar las acciones necesarias,
f) registrar los resultados de las acciones correctivas tomadas, y
g) revisar las acciones correctivas tomadas para asegurarse de que son
eficaces. Las acciones correctivas deben registrarse.
La organización debe manipular los productos no conformes tomando
acciones para prevenir el ingreso del producto no conforme en la cadena
alimentaria, a menos que sea posible asegurarse de que:
a) los peligros relacionados con la inocuidad de los alimentos en
cuestión han sido reducidos a los niveles aceptables definidos,
b) los peligros relacionados con la inocuidad de los alimentos en
cuestión serán reducidos a los niveles aceptables identificados antes de su
ingreso en la cadena alimentaria, o
c) a pesar de la no conformidad, el producto todavía cumple los niveles
aceptables definidos en lo concerniente a los peligros relacionados con la
inocuidad de los alimentos.
Todos los lotes de productos que puedan haber sido afectados por una
situación no conforme deben mantenerse bajo control de la organización hasta
que hayan sido evaluados. Si a los productos que ya no están bajo el control de
la organización se les determina subsecuentemente como no inocuos, la
organización debe notificarlo a las partes interesadas pertinentes e iniciar
una retirada de producto. El término “retirada del producto” incluye la recuperación
del producto del mercado. Deben documentarse los controles y las respuestas
derivadas, así como la autorización para tratar los productos potencialmente no
inocuos. Cada lote de productos afectados por la no conformidad sólo debe ser
liberado como inocuo cuando aplique cualquiera de las condiciones siguientes:
a) otra evidencia aparte del sistema de seguimiento demuestra que las
medidas de control han sido eficaces;
b) la evidencia muestra que el efecto combinado de las medidas de
control para ese producto en particular cumple con el desempeño previsto (es
decir, niveles aceptables identificados);
c) los resultados del muestreo, análisis y/o de otras actividades de
verificación demuestran que el lote de productos afectado cumple con los
niveles aceptables identificados para los peligros relacionados con la
inocuidad de los alimentos en cuestión.
Después de la evaluación, si el lote de producto no es aceptable para su
liberación, debe someterse a una de las actividades siguientes:
a) reproceso o posterior proceso dentro o fuera de la organización para
asegurarse de que el peligro relacionado con la inocuidad de los alimentos se
elimina o reduce a niveles aceptables;
b) destrucción y/o disposición como desecho.
Para permitir y facilitar que se retiren de manera completa y a tiempo
los lotes de productos finales que han sido identificados como no inocuos:
a) la alta dirección debe designar al personal que tenga la autoridad
para iniciar una retirada del producto y el personal responsable de llevarla a
cabo, y
b) la organización debe establecer y mantener un procedimiento
documentado para:
1) notificar a las partes interesadas pertinentes (por ejemplo
autoridades legales y reglamentarias, clientes y/o consumidores),
2) la manipulación de productos retirados, así como los lotes de
productos afectados aún en stock, y
3) la secuencia de acciones a tomar.
Los productos retirados deben salvaguardarse o mantenerse bajo
supervisión hasta que se hayan destruido, se utilicen para otros propósitos que
no sean los pretendidos originalmente, se determine que son inocuos para el
mismo (u otro) uso previsto, o sean reprocesados de tal manera que se asegure
que se vuelven inocuos. La causa, alcance y resultado de una retirada de
productos se debe registrar e informar a la alta dirección, como información de
entrada para la revisión por la dirección. La organización debe verificar y
registrar la eficacia del programa de retirada de productos a través del uso de
técnicas apropiadas (por ejemplo simulación o práctica de retirada de
productos).
Validación, verificación y mejora del sistema de gestión de la inocuidad
de los alimentos
El equipo de la inocuidad de los alimentos debe planificar e implementar
los procesos necesarios para validar las medidas de control y/o las
combinaciones de medidas de control, y para verificar y mejorar el sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos. Con anterioridad a la implementación
de las medidas de control a ser incluidas en los PPR operativos y el plan HACCP
y después de cualquier cambio en ellos, la organización debe validar que:
a) las medidas de control seleccionadas son capaces de alcanzar el
control pretendido de los peligros relacionados con la inocuidad de los
alimentos para las que han sido designadas, y
b) las medidas de control son eficaces y permiten, cuando se combinan,
asegurar el control de los peligros relacionados con la inocuidad de los
alimentos identificados para obtener productos terminados que cumplan los
niveles de aceptación definidos.
Si el resultado de la validación muestra que uno o ambos de los
elementos anteriores no puede ser confirmado, la medida de control y/o sus
combinaciones deben ser modificadas y evaluadas de nuevo. Las modificaciones
pueden incluir cambios en las medidas de control (es decir en los parámetros de
proceso, rigurosidad y/o su combinación) y/o uno o varios cambios en las
materias primas, tecnologías de fabricación, características del producto
terminado, métodos de distribución y/o uso previsto del producto terminado. La
organización debe proporcionar evidencia de que los métodos y los equipos de
seguimiento y medición especificados son adecuados para asegurar el desempeño
de los procedimientos de seguimiento y medición.
Cuando sea necesario asegurar
resultados válidos, los equipos y los métodos de medición utilizados deben:
a) calibrarse o verificarse a intervalos especificados, o antes de su
utilización, comparados con patrones de medición trazables a patrones de
medición nacionales o internacionales; cuando no existan tales patrones, debe
registrarse la base utilizada para la calibración o la verificación,
b) ajustarse o reajustarse según sea necesario,
c) identificarse para poder determinar el estado de calibración,
d) protegerse contra ajustes que pudieran invalidar el resultado de la
medición, y
e) protegerse contra los daños y el deterioro.
Se deben mantener registros de los resultados de la calibración y la
verificación. Además, la organización debe evaluar la validez de los resultados
de las mediciones anteriores cuando se detecte que los equipos o el proceso no
están conformes con los requisitos. Si los equipos de medición no son
conformes, la organización debe tomar las acciones apropiadas para los equipos
y el producto afectado. Deben mantenerse registros de tales evaluaciones y
acciones resultantes. Debe confirmarse la capacidad de los programas
informáticos para el uso especificado cuando se utilicen en el seguimiento y
medición de los requisitos especificados. Esto debe llevarse a cabo antes de
iniciar su utilización y confirmarse de nuevo cuando sea necesario.
La organización debe llevar a cabo a intervalos planificados auditorías
internas para determinar si el sistema de gestión de la inocuidad de los
alimentos:
a) es conforme con las disposiciones planificadas, con los requisitos
del sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos establecidos por la
organización, y con los requisitos de esta Norma Internacional, y
b) se implementa y actualiza eficazmente.
Se debe planificar un programa de auditorías considerando la importancia
de los procesos y las áreas a auditar, además de cualquier acción de
actualización resultado de auditorías previas. Se deben definir los criterios
de auditoría, el alcance, la frecuencia y la metodología. La selección de los
auditores y la realización de las auditorías deben asegurar la objetividad e
imparcialidad del proceso de auditoría. Los auditores no deben auditar su
propio trabajo. Deben definirse, en un procedimiento documentado, las
responsabilidades y requisitos para la planificación y la realización de
auditorías, para informar de los resultados y para mantener los registros. La
dirección responsable del área que esté siendo auditada debe asegurarse de que
se toman acciones sin demora injustificada para eliminar las no conformidades
detectadas y sus causas. Las actividades de seguimiento deben incluir la
verificación de las acciones tomadas y el informe de los resultados de la
verificación.
El equipo de la inocuidad de los alimentos debe evaluar sistemáticamente
los resultados individuales de la verificación planificada. Si la verificación
no demuestra conformidad con lo planificado, la organización debe tomar
acciones para alcanzar la conformidad requerida. Tales acciones deben incluir,
entre otros, la revisión de:
a) los procedimientos existentes y los canales de comunicación,
b) las conclusiones del análisis de peligros, los PPR operativos
establecidos y el plan HACCP,
c) los PPR, y
d) la eficacia de la gestión de los recursos humanos y de las actividades
de formación.
El equipo de la inocuidad de los alimentos debe analizar los resultados
de las actividades de verificación, incluyendo los resultados de las auditorías
internas y de las auditorías externas. El análisis debe llevarse a cabo para:
a) confirmar que el desempeño global del sistema cumple con lo
planificado y los requisitos del sistema de gestión de la inocuidad de los
alimentos establecidos por la organización,
b) identificar la necesidad de actualización o mejora del sistema de
gestión de la inocuidad de los alimentos,
c) identificar tendencias que indiquen una mayor incidencia de productos
potencialmente no inocuos,
d) establecer información concerniente al nivel e importancia de las
áreas a ser auditadas para planificar el programa de auditoría interna, y
e) proporcionar evidencia de la eficacia de las correcciones y las
acciones correctivas tomadas.
Los resultados de los análisis y de las actividades resultantes se deben
registrar e informar, de manera apropiada, a la alta dirección como información
de entrada para la revisión por la dirección. Esto también debe utilizarse como
elemento de entrada para actualizar el sistema de gestión de la inocuidad de
los alimentos. La alta dirección debe asegurarse de que la organización mejora
continuamente la eficacia del sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos
mediante el uso de la comunicación, la revisión por la dirección, la auditoría
interna, la evaluación de los resultados individuales de la verificación, el
análisis de los resultados de las actividades de verificación, la validación de
las combinaciones de las medidas de control, las acciones correctivas y la
actualización del sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos.
La Norma ISO 9001 trata la mejora continua de la eficacia de los
sistemas de gestión de calidad. La Norma ISO 9004 proporciona orientación sobre
la mejora continua de la eficacia y eficiencia de los sistemas de gestión de
calidad más allá de lo establecido en la Norma ISO 9001. La alta dirección debe
asegurarse de que el sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos se actualiza
continuamente. Para lograr esto, el equipo de la inocuidad de los alimentos
debe evaluar a intervalos planificados el sistema de gestión de la inocuidad de
los alimentos. El equipo debe entonces considerar si es necesario revisar el
análisis de peligros, los PPR operativos establecidos y el plan HACCP. Las
actividades de evaluación y actualización se deben basar en:
a) los elementos de entrada de la comunicación, tanto externa como
interna, según lo establecido;
b) los elementos de entrada de cualquier otra información relativa a la
idoneidad, adecuación y eficacia del sistema de gestión de la inocuidad de los
alimentos,
c) las conclusiones de los análisis de los resultados de las actividades
de verificación, y
d) los resultados de la revisión por la dirección.
Las actividades de actualización del sistema se deben registrar e
informar, de manera apropiada, como información de entrada para la revisión por
la dirección.
"SOMOS
LO QUE HACEMOS REPETIDAMENTE. EXCELENCIA, POR LO TANTO, NO ES UN ACTO SINO UN HÁBITO"
ARISTOTELES
LEGALES: El
autor no asume responsabilidad alguna por la descarga, copia, distribución,
modificación o alteración de los contenidos publicados, sean propios del mismo
o de terceros, los cuales pudieren estar protegidos por Copyright, Derechos de
Propiedad Intelectual, Derechos de Autor, o relacionados. La bibliografía
general de los temas expuestos, así como
todos los créditos fotográficos, están en poder del Autor y no se publican dada
su extensión, pero se enviarán por mail a los interesados que los solicitaren con
nota personal debidamente fundamentada.
Nice post. I was checking continuously this blog and I am impressed! Very helpful information specially the last part :) I care for such info a lot. I was looking for this certain info for a long time. Thank you
ResponderBorrarCertificacion ISO 22000 Argentina